La inesperada derrota de la selección argentina hundió los ánimos de todos.
“Nadie quiere trabajar después de esta derrota. Es momento de tirarse en la cama y llorar. Desahogarse. Y luego seguir adelante. Quizás mañana o bien esperar hasta el sábado”, reclamó un alto dirigente gremial. Bueno, no tan alto, más bien ancho dirigente gremial porque es uno de los ‘gordos de la CGT’.
Desde el gobierno y asociaciones empresarias definirán en las próximas horas declarar asueto por tristeza. Por su parte, los líderes piqueteros ya anunciaron que hoy no trabajarán “porque los seguidores ni ganas de llevar banderas tienen”.