Peritos judiciales iniciaron la búsqueda de las vacunas que Beatriz Sarlo dijo que le ofrecieron por debajo de la mesa.
Luego de un intensa pesquisa no encontraron las vacunas, pero si una gran cantidad de mocos pegados debajo de la mesa.
“La defensa de la escritora explicó que es muy común que alguien que se pase tanto tiempo sentada trabajando tenga ese hábito, sacarse los mocos y pegarlos debajo de la mesa, no es culpable por ello”, explicó.
“Ella (Beatriz) se pasa todo el día sentada frente a esa mesa. Y cuando no lo hace está en la mesa de los programas de TN o La Nación +. Tendrían que buscar en esos lugares también”, expuso por su parte la fiscal.
